Para quienes vamos por la vida con determinación, las estrellas están al alcance de la mano. Tocar las estrellas es la metáfora del éxito, el resultado feliz de una empresa.
Éxito y buenos resultados, son términos que pueden definir la concreción de un proyecto, el de Viña San Pedro con la creación de su Altaïr; en el cielo, la estrella más brillante de la constelación de Aquila, en la tierra uno de los íconos de Chile.
Una historia que mira lejos
El año 2001, San Pedro Wine Group dio inicio a un gran proyecto destinado a desarrollar una bodega
boutique, enfocada exclusivamente hacia la producción de vinos de terroir, de la más alta calidad, orientados a convertirse en lo mejor que Chile tiene para ofrecer.
Asi nacen, Altaïr y Sideral, vinos orientados principalmente a los mercados internacionales.
La meta. Por un lado lograr una sinergia entre las características del terroir y el talento del equipo humano integrado por la enóloga residente Ana María Cumsille y el renombrado enólogo asesor, el francés Pascal Chatonnet, aplicando la más moderna tecnología.
Los viñedos de Altaïr están emplazados en el Valle del Cachapoal, 100 km al sur de Santiago, con una importante influencia de sus peculiares características geográficas, en especial, su ubicación al pie de la Cordillera de los Andes lo que genera una elevada amplitud térmica entre el día y la noche (+ / - 26 ° C) y los suelos con bajo contenido orgánico (arcilloso - pedregoso)que permiten la producción de vinos con una exuberante expresión de frutas frescas, una elegancia única y una balanceada estructura.
Los viñedos incluyen actualmente Cabernet Sauvignon, Carmenere, Petit Verdot, Syrah y Cabernet Franc (lotes origin
ales de Sangiovese y Merlot fueron reemplazados por Carmenere después de cosechas de 2004 y 2008 respectivamente).
Con una densidad de plantación que oscila entre 5.000 a 10.000 plantas por hectárea, alcanza un rendimiento de 1 kilo por planta para Altaïr y 1,5 kilos por planta para Sideral.
La dedicación de los líderes pasa por mas de un detalle. La bodega se encuentra ubicada en un nivel superior a los viñedos, lo que además de brindar una maravillosa perspectiva del valle, se complementa con las rigurosas medidas de protección del medio ambiente mediante una arquitectura respetuosa, pensada para mimetizarse con el entorno.
El vanguardista sistema gravitacional de vinificación implementado, pionero en Chile, permite trasladar las uvas y mostos gracias a su propio peso hacia los estanques, garantizando la menor intervención y el más delicado tratamiento, hasta su llegada al proceso de fermentación.
Durante la primera vendimia, el año 2002, los vinos obtenidos alcanzaron una excelente calidad. Tras el envejecimiento en barricas nuevas de roble francés fueron embotellados y almacenados bajo condiciones climatizadas para asegurar su correcta evolución. Estos primeros vinos fueron lanzados al mercado internacional recién en el año 2004.
Varios años y numerosos reconocimientos y premios después, a fines del año 2008 fue lanzada la añada 2004, la cual está actualmente disponible en el mercado.
Reconociemientos
Wine Advocate del crítico Robert Parker, ranqueó sobre los 90 puntos a las cosechas 2002, 2003 y 2004.
International Wine Cellar, Stephen Tanzer’s, Sideral 2004, 90 Puntos.
International Wine Cellar, Stephen Tanzer’s, Altair 2004, 93 Puntos.
The Wine Advocate, Sideral 2004, 92 puntos.
The Wine Advocate, Altair 2004, 94 puntos.
Concurso de la Union de Enólogos de Francia, Sideral 2005, Medalla de Oro, Vinalies International 2009.
Wine Enthusiast, Editor’s choice para Altair 2005, primer lugar con 93 puntos. Sideral 2005, 90 puntos.
Esta es la semblanza de los grandes vinos que nuestros clientes tendrán el placer de degustar en la cata vertical de Altair a llevarse a cabo el próximo mes de abril.
Sea parte de esta experiencia que ofrece Andina S.A a sus exquisitos clientes.
Nos vemos en abril!!
